El viaje empezaba un viernes por la tarde y terminaba un martes de madrugada...
El viernes simplemente fue ir al aeropuerto para llegar a Singapur. Al principio pensábamos dormir un buen rato en Singapur, pero evidentemente los endémicos retrasos del aeropuerto de Jakarta nos lo hicieron imposible. Otra vez, 75 minutos de retraso. Total que entre llegar, cenar, coger el metro... no estuvimos en el hostal más de 4 horas... bueno. A las 6.00 salía nuestro vuelo a Macao.
Éste vuelo sí, con un retraso mínimo de 15 minutos, llegábamos a Macao a eso de las 10.00. Ahora el problema era la enorme cola de gente para pasar el control de pasaportes. Pese a nuestro especial pasaporte, el policía de inmigración decidió que nos pusiéramos en la cola como los demás... Ya empezábamos comiendo tiempo de visita.
Llegada a Macao
Aeropuerto internacional de Macao
Cola infinita para el control de pasaportes
Pero bueno, manos a la obra, sacamos unas patacas (moneda de Macao) nos metimos en un autocarro (si, al ser ex-colonia portuguesa se llaman así), que por cierto no dan cambios, y rumbo a la península de Macao. El aeropuerto está construido sobre una isla artificial y unido por puentes a la isla de Taipa (también perteneciente a Macau SAR).
Nos metimos un recorrido de aproximadamente 4 horas, con un calor que aplatanaba... pero la impresión fue muy positiva. La parte vieja de la ciudad era muy bonita, muy portuguesa, pero con un toque chino. Muy interesante.
De camino a Macao
La ciudad tiene un aire portugués
Pero también un aire chino
Puesto con comida china
Patio do Poeta
Balcones tipo jaula...
El Gran Casino Lisboa domina la ciudad
Parque donde descansamos
Torre de Macao
Y después de la visita cultural... tocaba comer, y qué mejor sitio que el Grand Lisboa (sí, el enorme edificio de 261 metros dorado). La comida espectacular, un poco de bakalao, cordero al curry y chuleta de cerdo, todo ello aderezado con cerveza china Tsingtao. Eso sí, mención especial a la apertura de puertas, jabón, agua...etc automática del baño... jajaja.
Comida en el Grand Casino Lisboa
Desde fuera, impresionante
El siguiente paso, ver el ajetreo del casino, y cómo la gente pierde 2.300€ en una jugada de 1 minuto... y de allí, directo a la torre de Macao, de 338 metros abierta en diciembre de 2.001.
Vistas desde la torre de Macao
Y después de ver Macao, ya solo quedaba coger un ferry, y a visitar Hong Kong. A las 22.15 salíamos por unos 17 €uros. Pasar controles de pasaporte...y ya estábamos en Hong Kong (1 hora de ferry). Estábamos reventados, así que llegamos a las Chungking Mansions y a dormir.
Barco de Macao a Hong Kong
A la mañana siguiente: el reencuentro!! Después de varios meses, volvía a estar con Oskar, y de paso, hizo perfectamente de guía sobre Hong Kong.
Nathan road
Chungking Mansions
Nacho y yo delante de la isla de Hong Kong
Filipinas (trabajadoras del hogar) de domingo
Calles desiertas (un calor muy serio)
Una ciudad moderna
Grande el reencuentro con Oskar (kowloon de fondo)
Así como Macao tiene su parte colonial, su parte de edificios más o menos grandes, Hong Kong no tiene esa vida. Realmente Hong Kong es como me imagino a New York, avenidas grandes de las que salen edificios enormes de acero y vidrio y con gente de todas las culturas, así como pequeños parques perfectos. Me pareció muy impersonal. Aún así había mucho expatriado, indio... y millones de filipinas que salen los domingos a jugar a cartas. Además de que el orden está por encima de todo. Es decir, todo está ordenado, todo tiene normas (sin ir más lejos, los autobuses públicos, estaban forrados de carteles que avisaban de todo lo que NO puedes hacer).
No entraba ni un cartel más
Plaza con las banderas de China y Hong Kong
Rascacielos de Hong Kong de noche
The peak, a 428 msnm
Vista de Hong Kong desde Kowloon
Abundaban los coches de lujo (ejemplo Ferrari 458 Italia)
Contrastes (tienda china y Mc)
Carteles chinos
Rascacielos con andamios de bambú
El lunes, antes de irnos nos fuimos a la isla de Lantau, para de camino al aeropuerto, pasar por uno de los budas más grandes del mundo, Tian Tian Buddha. Situado en Ngong Ping, está hecha de bronce y se terminó en 1.993. Y desde allí, en teleférico a Tung Chung, al lado del aeropuerto. Que por cierto, tiene un centro comercial lleno de outlets...perfecto para terminar el viaje.
Gran Buddha (hecho de bronce, mide 34 m, pesa 250 Tm)
Ofrendas y templo de fondo
Teleférico y buda de fondo
Monasterio de Po Lin
Aeropuerto a la izquierda, Tung Chung a la derecha
Salida de Hong Kong, con 25 minutos de retraso, para llegar a Singapur y comernos otros 80 minutazos de retraso...
Volando de vuelta
PD: Próxima parada, Singapur, a reencontrarme con Lander!
Lo de las filipinas en HK es la leche... ¡yo aluciné! ¡escuché más tagalo que chino!
ResponderEliminarEn fin, pobrecitas mías emigran a donde sea con lo bonito que es su país...
Por cierto, qué bien os sienta Asia ;)
Graciaaas Claudia!!
ResponderEliminarQue bien nos sienta a todos Asia!! ;)
Por cierto, se supone que entre las filipinas, también había alguna indonesia... pero si, es una locura, aprovechando cada sombra, jugando a cartas!! jaja
Estás muy delgao Mendo!!!! Tú sigue disfrutando y dándonos envidia de la sana desde allí!! Hoy un año de la salida de la expedición nº1 a la India!!!
ResponderEliminarSaludos desde Onaindia offices!!!
Un abrazo. Manrique!
Por cierto, como tngo que hacer para no publicar como anónimo?? y por ejemplo como usuario de google??? Lo intento pero me vuelve loco y tras marearme, siempre vuelvo a la opción de anonimo.
ResponderEliminarManrique (again)