Después de haber viajado por varios países de alrededor, todavía no conocía el más cercano de todos: Singapur. Pero bueno, como siempre, eso tiene fácil remedio, comprar los vuelos (100€) y ya! Además éste viaje tiene un segundo reencuentro con un chino, pero ésta vez de Beijing!
Reencuentro Beijing - Jakarta
Bueno, pues el vuelo de Jakarta salió con 15 minutos de retraso, lo que en Indonesia equivale a ser puntual, por lo que a las 20.20 aterrizaba en el aeropuerto de Changi. Directamente al InnCrowd backpakers, un sitio muy limpio y decente, con desayuno incluido en medio de Little India (supongo que le llamarán así por la cantidad de indios que había, no por su aspecto)... Según pasaba por allí, un grito llamó mi atención. Allí estaban gente de Beijing, y su amiga sinagapurense. Esperamos a más compañeros, y esa noche salimos de fiesta por la discoteca más de moda en Singapur, Zirca en Clarke Quay (30 dólares de Singapur, unos 20€ por entrada y dos copas)...
Barrio indio (¿?)
A la mañana siguiente, antes de pasar por el hostel, desayuno en el Mac (1er desayuno del día). Según nos levantamos, desayuno gratis en el hostel, ésta vez tostadas con mermelada y café (2º desayuno del día). A eso de las 10 y pico de la mañana nos esperaba en la puerta del hostel nuestra amiga singapurense para empezar la visita. La primera parada era ver un par de templos, uno hinduísta y otro budista.
Templo budista
Templo hinduísta
Casas de colores de lo más horteras
El siguiente paso, para empezar a mimetizarnos con le gente local...volver a desayunar (3er desayuno del día), pero ahora sopa con costillas, bolas de pescado... (Bugis bah kut teh). Una vez ¿saciado? nuestro estómago nos fuimos a Chinatown. Increible, salvo por las típica lámparas rojas chinas, nadie diría que eso es un barrio chino... en fin
Prohibido en el metro
Barrio chino (¿?)
Sopita con bolas de pescado y carne
Nuestro siguiente destino: el jardín nacional de la orquídeas, y el enorme parque que lo albergaba. Primero el enorme parque, que venía muy bien para tirarnos en la hierba... pero después...sinceramente se nos fue de las manos, pero es normal, había una cantidad de plantas, flores... y en resumen posibilidades de fotos preciosas a cada paso. Allí nos tiramos bastante tiempo!
Parque enorme
Fiebre fotográfica
Fuente de la entrada del jardín de las orquídeas
Preciosa
Y otra de las muchas
Y cómo no, seguíamos sin parar... ahora tocaba Orchad Road, la calle del lujo en Singapur... pues eso.
No todo Orchad Road es orégano
Y claro, ya llevábamos mucho tiempo sin meter algo de comida en el cuerpo... fácil, ahora fuimos al Wisma Atria Food Republic a comernos unos hokkien mee y char kway teow! Y por supuesto no nos íbamos a conformar con ésto... hacía falta el postre: un bollo con durian helado dentro!! A mi me gusta...pero a los demás parece que no tanto..jeje
Ópera de Singapur (intenta imitar a un durian)
Ahora nos dirigimos hacia Marina Bay, pasando por el palacio del presidente (Istana), la ópera de Singapur (que quiere imitar a la forma del durian), para ver el espectáculo de luces y agua más grande el sudeste asiático. A mi me pareció un espectáculo muy agradable y vistoso, totalmente recomendable. Por cierto, de camino para allí nos encontramos a una marea de gente que volvía de ensayar para la fiesta nacional de Singapur (9 de Agosto). Un vistazo al enorme hotel Marina Bay Sands, y después de un buen rato que tardamos en conseguir el taxi....
Marea de gente
Hotel Marina Bay Sands
Rascacielos de Singapur
Espectáculo de luces y agua
A cenar!! Ahora en el Serangoon Chomp Chomp food centre (todos los sitios donde comimos eran food courts) y probaría una de las comidas que más me ha gustado: filetes de raya a la parrilla (delicioso!!). Además de diversos sates, pastel de zanahoria, tortilla de ostras, alitas de pollo... y con una limonada enorme.
Filetes de raya (en medio)
Así dábamos fin a un día de lo más aprovechado, que con la fiesta del día anterior no había dejado echos polvo. Ese día dormiríamos a pierna suelta... hasta la mañana siguiente que nos esperaría otra vez en la puerta del hostel nuestra guía particular singapurense.
El domingo fue un día mucho más tranquilo, pese a que seguimos descubriendo rincones de Singapur. La zona de rascacielos, acabando en Sentosa (significa tranquilo en bahasa indonesia), una isla que es el lugar donde unos 5.000.000 de personas al año vienen a divertirse, relajarse, y todo lo relacionado con ocio. Hay campos de golf, un Universal Studios, bares tipo Ibiza (hay un Café del Mar), playas artificiales con vistas a montones de buques cargueros esperando a entrar en el mayor puerto comercial del mundo... la isla sigue ganando tierra al mar gracias a la arena comprada a Indonesia y Malasia.
Tranvía a Sentosa
Playa limpia con barcos de fondo
Antes de despedirnos, cómo no, fuimos a comer a otro food court a comer ancas de rana, noodles...
Cazuelita con ancas de rana
En definitiva, un fin de semana muy bien aprovechado con la compañía de gente increíble!! (que me dejaron un buen sabor de boca - nunca mejor dicho, no paramos de comer! - de Singapur)
Foto de grupo
PD: Saludos a la gente venida desde Beijing, desde Basauri, desde Jakarta y en especial a la increíble guía singapurense!!!
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